Infraestructura: clave para el crecimiento sostenible en América Latina

Históricamente, la infraestructura ha sido financiada principalmente por los gobiernos y los bancos. Sin embargo, desde la crisis financiera de 2008, la participación del sector privado ha sido cada vez más crucial, impulsada por la disminución del gasto público y las restricciones bancarias para financiar proyectos a largo plazo. Esto ha dado lugar a nuevas oportunidades para la financiación privada, principalmente a través de Asociaciones Público-Privadas (APP).

La deuda en infraestructura se destaca como una alternativa de inversión sólida, caracterizada por su baja volatilidad y menor correlación con los mercados públicos y otros activos alternativos. Esto la convierte en una opción atractiva para diversificar portafolios, ofreciendo previsibilidad en los flujos de efectivo y protección contra la inflación.

Oportunidades de inversión en Infraestructura

El crecimiento de los fondos privados destinados a la financiación de infraestructura ha sido notable. Desde 2008 hasta 2023, los recursos administrados por fondos de deuda para infraestructura pasaron de 1,000 millones a 210,000 millones de dólares, con un crecimiento interanual superior al 45%. Este auge refleja la creciente demanda de capital para proyectos de energía renovable, digitalización, y mejoras en infraestructura de transporte, en un contexto marcado por la transición energética y la digitalización.

Además, la financiación de estos proyectos se ve favorecida por las altas barreras de entrada, la predictibilidad de los flujos de ingresos y las menores tasas de incumplimiento en comparación con la deuda corporativa. Estos factores convierten a la deuda en Infraestructura en una opción atractiva incluso en momentos de volatilidad en los mercados globales.

Mega tendencias que impulsan el crecimiento

Según el medio especializado Infrastructure Investor, se identifican cuatro mega tendencias clave que impulsarán la expansión de la deuda en Infraestructura:

1. Descarbonización: la lucha contra el cambio climático crea una gran demanda de inversión en proyectos que promuevan la transición energética y la reducción de emisiones.
2. Digitalización: la creciente demanda de datos y conectividad impulsa inversiones en telecomunicaciones, centros de datos y fibra óptica.
3. Desglobalización: los conflictos geopolíticos y las disrupciones en las cadenas de suministro han fomentado el nearshoring y friendshoring, lo que requiere una infraestructura logística robusta.
4. Demografía: el envejecimiento de la población demanda nuevas inversiones en servicios de salud e infraestructuras adaptadas a las necesidades cambiantes.

Unión Para la Infraestructura: liderando el desarrollo de Infraestructura en la región

Desde Unión Para la Infraestructura, una alianza entre Credicorp Capital y SURA Investments, hemos reconocido el potencial de la deuda en Infraestructura como catalizador del desarrollo en América Latina. Desde 2015, hemos construido una plataforma de fondos de deuda para financiar proyectos clave, como carreteras y aeropuertos en Colombia, bajo esquemas de APP. Esta plataforma gestiona actualmente más de 1,600 millones de dólares en capital institucional local e internacional, con una trayectoria consolidada en la financiación de infraestructura.

En línea con lo anterior, reafirmamos nuestro compromiso con la infraestructura, logrando, en los últimos años generar un impacto positivo en las comunidades locales, creando más de 73,000 empleos y contribuyendo al desarrollo sostenible de la región.

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